El sistema cerrado es aquel sistema de administración de fluidos sin interrupciones entre el catéter y la disolución a infundir por lo que protege al personal sanitario de la exposición de patógenos sanguíneos. Permite la conexión o desconexión de jeringas o sistemas de perfusión con total seguridad, disminuyendo de este modo la contaminación del canal de paso en más del 60%, todo ello sin necesidad de utilización de tapones u obturadores para cerrar el acceso vascular. Está destinado para su empleo en perfusiones intravenosas, administración de medicamentos y nutrición parenteral, extracciones y/o transfusiones de sangre. Permite la infusión sin necesidad de aguja, lo que disminuye el riesgo de pinchazos accidentales para el personal sanitario. Resistente a lípidos. Libre de látex. Compatible con todas las conexiones ISO Luer y Luer Lock. Tiempo de permanencia: 72 horas o 100 activaciones, con o sin administración de soluciones lipídicas.